1) Ordena tu vida hay que deshacerse de todas las cosas inútiles que nos rodean.
Mientras menos cosas tenemos, la necesidad de preocuparnos cuidarlas, ordenarlas y moverlas, será menor y tendremos más tiempo para interesarnos por lo que realmente importa.
2) Eliminar las actividades obligatorias e innecesarias de nuestra vida.
Muchas veces a través de nuestros amigos o el trabajo estamos obligados a realizar actividades sociales o acudir eventos que nos alejan de lo que realmente queremos hacer, nos alejan de la inspiración. Debemos aprender a rechazar sin sentirnos culpables todo aquello que realmente no queremos hacer porque no es importante para nosotros, ocupándonos el tiempo que podríamos utilizar con nuestra familia, nuestros hijos y las cosas que realmente nos importan.
3) Nuestro tiempo libre debe ser realmente libre.
Muchas veces las personas dejan en su agenda un espacio libre, pero en realidad lo dedicamos a cumplir con obligaciones sociales innecesarias. El tiempo libre debemos utilizarlo para estar realmente libres, hacer lo que queremos y sentir la inspiración.
4) Saca tiempo para la meditación y el yoga.
Meditando ascendemos nuestra mente a lugares insospechados permitiendo conocer y sanar aspectos que de otra forma sería imposible.
5) Regresa a la sencillez de la naturaleza.
De la naturaleza venimos. Un tiempo alejados de las tecnologías y de la civilización moderna es la mejor manera de encontrar la calma y la meditación. ¿Cuántas personas pasan su día a día preocupados por el móvil o revisar sus email?, una vida sencilla cerca de la naturaleza nos ayuda a encontrar la inspiración casi mejor que cualquier otra cosa.
6) Aléjate de aquellos que te critican.
Hay personas que siempre están mirando lo peor de ti, te critican sin realmente querer construir. Son energías negativas qué consumen nuestro tiempo e inspiración. Sin crear enemigos debemos alejarnos de todos aquellos que no nos trasmiten nada positivo.
7) Es necesario tener tiempo para la salud.
Cuando tenemos la salud no nos preocupamos por ella, solo cuando nos toca la enfermedad comenzamos a trabajar activamente para cuidar nuestro cuerpo. Es necesario apartar tiempo en el día a día para mejorar y mantener nuestra salud física y espiritual a través de ejercicios y actividades que realmente nos llenen, siempre acompañados de una dieta adecuada y de las mejores personas las que realmente nos importan.
8) Hay que jugar… juega juega y juega.
Cada vez nos olvidamos más de que fuimos niños. Los niños son la mayor fuente de inspiración y creación. Debemos jugar y conectarnos con el “Yo” creativo, para así poder desarrollar nuestras habilidades y aplicarlas de una mejor forma en nuestro día a día del hogar y del trabajo.
9) Vive cada momento, disminuye tu ritmo.
Nos empeñamos en vivir todo en momento cuando la realidad es que si vamos más lentos podemos hacer las cosas mucho mejor y desfrutar de las sorpresas que nos depara la vida en el día a día. La inspiración solo nos alcanzará estando en paz. Disminuye tu velocidad, no podrás llegar más lejos.
10) Hay que evitar las deudas.
Una persona que intenta simplificar su vida al máximo debe evitar las deudas. Son difíciles de saldar o eliminar en cortos periodos de tiempo. Una hipoteca nos puede acompañar durante años llenándonos de preocupación y estrés que no podemos controlar. Hay que simplificar nuestra vida y evitar en lo posible la adquisición de deudas e hipotecas.
11) Olvídate del valor del dinero.
En el modelo de nuestra sociedad actual el dinero tiene una importancia primordial. Es necesario dejar de mirar las cosas por su valor, debemos mirar las por su importancia. Comprar un producto porque es más caro o simplemente comprar otro que realmente no necesitamos solo porque se encuentra en rebaja no es el ideal de simplificar la vida. Las cosas tienen el valor y la importancia que tienen para nosotros mismos, no su valor monetario.
12) Recuerda siempre tu espíritu inmortal.
Nos encontramos transitando por un mundo material atrapados en un cuerpo de carne y hueso, pero somos alma inmortal energía del universo, y debemos no olvidarlo nunca en el día a día. Si no dedicamos el tiempo necesario al crecimiento espiritual, a la evolución de nuestra alma, a la limpieza de nuestros chakras, nunca lograremos llegar al Nirvana y estamos desperdiciando el tiempo que nos ha concedido el universo en la tierra. Estaríamos desperdiciando nuestro tiempo como seres humanos.
